No soy ni un niño, ni un joven, ni un anciano; tampoco soy de ninguna casta.

Él solo es hombre quien guarda su palabra: No aquel que tiene una cosa en el corazón y otra en la lengua.

Es casi imposible estar aquí ahora cuando piensas que hay algún otro lugar donde estar.

Conceda me, Señor, este don, que nunca me abstenga de las obras justas.

Aquellos que me llaman Dios caerán en el profundo pozo del infierno. Mírenme como uno de sus esclavos y no tengan ninguna duda al respecto. Soy un siervo del Ser Supremo; y he venido a presenciar el maravilloso drama de la vida.

El egoísmo es una enfermedad tan terrible, él muere, para ser reencarnado sigue viniendo y yendo.

Habita en paz en la casa de tu ser, y el Mensajero de la Muerte no podrá tocarte.

El egoísmo es una enfermedad tan terrible, en el amor a la dualidad, hacen sus actos.

Si la gente usa la riqueza otorgada por Dios solo para sí mismos o para atesorarla, es como un cadáver. Pero si deciden compartirla con otros, se convierte en comida sagrada.

Para este propósito nací, que todos los virtuosos comprendan. Nací para promover la rectitud, emancipar a los buenos y destruir a todos los malhechores de raíz y rama.

Soy un sacrificio para el Guru, quien me ha curado completamente de la fatal enfermedad del egoísmo. Gloriosas y grandes son las virtudes del Guru, quien ha erradicado el mal y me ha instruido en la virtud.

Los mayores consuelos y la paz duradera se obtienen cuando se erradica el egoísmo desde dentro.

Bendito, bendito es ese Sikh del Guru, que va y cae a los Pies del Verdadero Guru. Bendito, bendito es ese Sikh del Guru, que con su boca, pronuncia el Nombre del Señor.

Muere en batalla. No regreses vivo. Ganando o muriendo con honor, no tengas miedo de morir.

Me postro ante los pies de aquellos que meditan en el Más Verdadero de los Verdaderos.

Reconoce toda la raza humana como una.

En el egoísmo, uno es asaltado por el miedo, pasa su vida completamente preocupado por el miedo.

Reconoce la Luz dentro de todos, y no consideres la clase social ni el estatus; no hay extraños en la casa de Dios.

El Señor mismo revela el Camino, Él mismo es el Hacedor de las acciones.

Aquél que medita sobre la Realidad Suprema y practica la rectitud obtendrá a Dios y escapará del nacimiento y la muerte.

Día y noche, medita por siempre en el Señor.

Vine al mundo cargado con el deber de mantener el derecho en todos los lugares, destruir el pecado y el mal... la única razón por la que nací fue para ver que la rectitud florezca, que lo bueno viva y los tiranos sean arrancados por sus raíces.

Bendito, bendito sea el Verdadero Guru, quien ha dado el supremo regalo del Nombre del Señor.