Es una muerte viviente si uno está obsesionado por el orgullo, el ego y la ira.

El amor humano es principalmente egoísmo; todo el tiempo piensa solo en el pequeño 'yo'. Ese 'yo' es el ego.

El servicio es la disciplina espiritual más alta. La oración y la meditación, o el conocimiento de las escrituras y el Vedanta (escrituras sagradas de la India), no pueden ayudarte a alcanzar el objetivo tan rápidamente como el servicio. El servicio tiene un efecto doble: extingue el ego y da dicha.

Todo servicio debe considerarse una ofrenda a Dios, y cada oportunidad de servir debe ser recibida como un regalo de Dios. Cuando el servicio se realiza en este espíritu, conducirá a la autorrealización.

La disciplina es la marca de una vida inteligente.

Dios ciertamente se complacería si das agua para los sedientos, pan para los hambrientos y ropa para los desnudos.

Puedes permanecer en el mundo durante muchos años, pero no dejes que el mundo te controle. No dejes que el mundo controle tu mundo interior. Hay un ejemplo del loto. Permanece profundamente en el barro. Sube hacia la luz, y no puede quedarse sin agua, porque moriría. Pero no se mezcla ni con el barro ni con el agua. Has visto el loto; incluso si el agua viene, simplemente se va de nuevo. Ahora, cuando hablan de Dios, siempre dicen 'los ojos de loto, los pies de loto' debido a este significado interior.

La oración debe emanar del corazón, donde reside Dios, y no de la cabeza, donde chocan doctrinas y dudas.

No te obsesiones con el egoísmo, imaginando que eres la causa de la acción, todo se debe a Dios.

Dios, si piensas, eres Dios. Polvo, si piensas, eres polvo. Como piensas, así te conviertes. Piensa en Dios, sé Dios.

Al principio puedes pensar: "El mundo es como un escenario. Yo soy solo un actor. Dios es el director. Todos somos Sus instrumentos, todos somos solo actores."

El silencio es el discurso del buscador espiritual.

No hay enemigo más vicioso que tu propia ira.

¿Quién soy yo? La respuesta es "Yo soy Dios". El cuerpo viene y va, pero el Atma es permanente. El cuerpo tiene nacimiento y muerte, pero el espíritu no tiene ninguno de estos. Llegas al punto en el que dices "Yo soy Dios", pero incluso allí, existe dualidad, "Dios y yo". Eso no es la Verdad completa. Cuando respiramos, la respiración emite el sonido de "So-Hum", "Él soy yo". Todavía existe la conciencia del cuerpo, el "Yo". Pero en el sueño profundo, la declaración de "Él" y "Yo" cae y solo "0" y "M" permanecen, "Om"; solo queda el Uno.

No contemples la muerte; es solo un incidente en la vida; contempla a Dios, quien es el maestro de toda la vida.

El deseo es como la sombra causada por el sol de la mañana; se alarga cuando corres a atraparlo.

Debes guardar en tu corazón el impulso espiritual hacia la luz y el amor, la sabiduría y la dicha.

Solo cuando el individuo es bueno, la sociedad progresará. Cuando la sociedad y la nación se basen en el cumplimiento de los valores humanos.

Abre las puertas de la sabiduría, rasga el velo de la ignorancia, entra en la morada de la Bienaventuranza Divina. Descansa en paz para siempre.

Cuando el cuerpo humano mismo está hecho de carne, ¿dónde está la necesidad de consumir la carne de aves y animales? Debes consumir solo comida sagrada. Solo entonces tendrás sentimientos sagrados.

Si vives en el nivel del Cuerpo y el Individuo, quedarás atrapado en la comida, la diversión y la juerga, la comodidad, la envidia y el orgullo. Olvídalo, ignóralo, supéralo; tendrás paz, alegría y calma. En el Camino Divino no hay posibilidad de fracaso; es el Camino del Amor.

Cada momento es el momento adecuado.

Estás buscando la alegría y la paz en lugares lejanos. Pero la fuente de la alegría está en tu corazón. El refugio de la paz está en ti.