Estamos revisando algunas traducciones.
Gracias por tu comprensión.
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Todo lo que somos es el resultado de lo que hemos pensado. Si las personas hablan o actúan con pensamientos malvados, el dolor las sigue. Si las personas hablan o actúan con pensamientos puros, la felicidad las sigue, como una sombra que nunca las abandona.
Todo lo que ha estado oculto está surgiendo, ¡no hay forma de detenerlo! Estas cosas no puedes ocultarlas: el sol, la luna y la VERDAD.
La paz viene de adentro; no trates de buscarla afuera.
Los hábitos de pensamiento pueden endurecerse en carácter. Así que observa tus pensamientos.
Inflamado por la codicia, incitado por el odio, confundido por la ilusión, vencido por ellas, obsesionado por la mente, un hombre elige su propia aflicción, la aflicción de los demás, la aflicción de ambos y experimenta dolor y tristeza.
Es mejor no hacer nada que hacer lo incorrecto. Porque lo que sea que hagas, lo haces a ti mismo.
A través de nuestros sentidos, el mundo aparece. A través de nuestras reacciones, creamos ilusiones. Sin reacciones, el mundo se vuelve claro.
Es mejor viajar bien que llegar.
Pocos cruzan el río. La mayoría está varada en este lado. En la orilla del río corren arriba y abajo. Pero el hombre sabio, siguiendo el camino, lo cruza, más allá del alcance de la muerte. Deja el camino oscuro por el camino de la luz.
Lleva tu ego como una prenda suelta.
El odio solo se vence con amor.
En lo que te has convertido es el resultado de lo que has pensado.
La perspectiva correcta es ninguna perspectiva o todas las perspectivas.
El odio nunca termina con odio. Solo el amor puede.
Así como un árbol, aunque cortado, vuelve a brotar si sus raíces permanecen intactas y firmes, de igual manera, hasta que el deseo latente sea erradicado, el sufrimiento brotará una y otra vez.
Perdona y sé libre. Olvida que has perdonado y sé más libre.
Quien responde a la maldad con maldad nunca será libre, pero quien no siente malicia pacifica a aquellos que odian. El odio trae miseria a la humanidad, por lo que el hombre sabio no conoce el odio.
Si realmente te amaras a ti mismo, nunca podrías lastimar a otro.
Quien causa sufrimiento sufrirá. No hay escapatoria.
La mayor victoria es la que se obtiene sobre uno mismo.
El fuego más feroz es el odio.
Cuando uno ve que todo existe como una ilusión, puede vivir en una esfera más alta que el hombre ordinario.
Después de la iluminación, la lavandería.