La creatividad nace del anhelo de ser la plenitud de quien eres.

Si la incertidumbre es inaceptable para ti, se convierte en miedo. Si es perfectamente aceptable, se convierte en mayor vitalidad, alerta y creatividad.

Mis sannyasins deben ser creadores, no a través de la mente sino a través de la meditación. Y eso llega por sí solo, no es necesario ni siquiera pensarlo. Así que no enseño creatividad, solo enseño silencio. Y de ese silencio surge mucha creatividad. Uno se sorprende a sí mismo de cuánto llevaba dentro de su ser, sin expresar, de lo grande que era su potencial. ¡Cuando uno se encuentra con ello, no puede creerlo!

El niño desobediente es continuamente condenado. El niño obediente, por otro lado, es continuamente elogiado. Pero, ¿has oído hablar de algún niño obediente que haya llegado a ser mundialmente famoso en alguna dimensión de la creatividad? ¿Has oído hablar de algún niño obediente que haya obtenido el Premio Nobel en algo - literatura, paz, ciencia? El niño obediente se convierte en una persona común. Todo lo que se añade a la existencia es añadido por los desobedientes.

El verdadero yo, una vez descubierto, es la fuente de creatividad, inteligencia y crecimiento personal. Ninguna solución externa tiene tal poder.

El arte objetivo es todo lo contrario. El hombre no tiene nada que lanzar, está completamente vacío, absolutamente limpio. De este silencio, de este vacío, surge el amor, la compasión, y de este silencio surge una posibilidad para la creatividad. Este silencio, este amor, esta compasión, son las cualidades de la meditación.

La CREATIVIDAD es cuando tú no estás, porque la creatividad es la fragancia del creador. Es la presencia de Dios en ti. La creatividad pertenece al creador, no a ti. Ningún ser humano puede ser creativo. Sí, el hombre puede componer, construir, pero nunca puede ser un creador. Cuando el hombre desaparece, cuando el hombre se vuelve completamente ausente, un nuevo tipo de presencia entra en su ser: la presencia de Dios. Entonces hay creatividad. Cuando Dios está dentro de ti, Su luz que empieza a caer alrededor de ti es creatividad. El clima que surge a tu alrededor debido a la presencia de Dios en ti es creatividad.

En el hinduismo, el concepto de creación, belleza y poder está intrincadamente entrelazado en el simbolismo de la danza de Shiva y Shakti. Shiva representa el principio masculino, a menudo representado como el dios de la destrucción y la transformación, mientras que Shakti encarna el principio femenino, simbolizando la energía primordial y la creatividad. Juntos, su danza simboliza la interacción entre la conciencia (Shiva) y la energía (Shakti) que impulsa el proceso de creación, preservación y destrucción en el universo.

No hay Dios, pero ciertamente hay una cualidad que yo llamo divinidad. Comprende compasión, amor, amistad, alegría, creatividad. Te trae nuevas canciones, te trae nuevos bailes. Te trae la verdad, y la inmersión en la verdad.

Hablo de una creatividad completamente diferente. El Taj Mahal... simplemente mirándolo en una noche de luna llena, y una gran meditación surgirá en ti. O los templos de Khajuraho, Konarak, Puri... simplemente meditando en ellos, te sorprenderá ver que toda tu sexualidad se transforma en amor. Son milagros de creatividad. No fueron creados por personas patológicas, fueron creados por aquellos que habían alcanzado.