Estamos revisando algunas traducciones.
Gracias por tu comprensión.
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El Dharma es la verdad de que todas las naturalezas son puras.
Los mortales liberan a los Budas y los Budas liberan a los mortales.
No pensar en nada es zen. Una vez que sepas esto, caminar, estar de pie, sentarse o acostarse, todo lo que hagas es zen. Saber que la mente está vacía es ver al buda... Usar la mente para la realidad es ilusión. No usar la mente para buscar la realidad es conciencia. Liberarse de las palabras es liberación.
No necesito ninguna escritura, ya que transmito enseñanzas más allá de las palabras e ideas.
A menos que veas tu naturaleza, toda esta charla sobre causa y efecto es un sinsentido. Los Budas no practican tonterías.
Según los Sutras, las malas acciones resultan en dificultades y las buenas acciones en bendiciones.
Dejando atrás lo falso, regresa a lo verdadero: no hagas discriminaciones entre el yo y los demás. En la contemplación, la mente de uno debe ser estable e inmóvil, como una pared.
Entrar por la razón significa realizar la esencia a través de la instrucción y creer que todos los seres vivos comparten la misma verdadera naturaleza, que no es evidente porque está oculta por la sensación y la ilusión.
Renunciar a uno mismo sin arrepentimiento es la mayor caridad.
Tener un cuerpo es sufrir.
La conciencia de los mortales es insuficiente. Mientras estén apegados a las apariencias, no son conscientes de que sus mentes están vacías. Y al aferrarse erróneamente a la apariencia de las cosas, pierden el Camino.
Intentar encontrar un Buda o la iluminación es como tratar de agarrar el espacio.
Para ver un pez debes observar el agua.
Aquellos que permanecen inmóviles ante el viento de la alegría siguen silenciosamente el Camino.
Liberarse de las palabras es liberación.
Las personas de este mundo están engañadas. Siempre anhelan algo—siempre, en una palabra, buscando.
El Camino es básicamente perfecto. No requiere perfección.
La mente es el Buda, y el Buda es la mente.
El buda es tu cuerpo real, tu mente original. Esta mente no tiene forma ni características, ni causa ni efecto, ni tendones ni huesos. Es como el espacio. No puedes sostenerla. No es la mente de los materialistas ni de los nihilistas. Si no ves tu propia naturaleza milagrosamente consciente, nunca encontrarás un Buda, incluso si rompes tu cuerpo en átomos.
Si usas tu mente para estudiar la realidad, no entenderás ni tu mente ni la realidad. Si estudias la realidad sin usar tu mente, entenderás ambas.
Quien se da cuenta de que los seis sentidos no son reales, que los cinco agregados son ficciones, que tales cosas no pueden ubicarse en ninguna parte del cuerpo, entiende el lenguaje de los Budas.
Pero las personas de mayor comprensión miran dentro de sí mismas, sin distracciones. Dado que una mente clara es el Buda, alcanzan la comprensión de un Buda sin usar la mente.
La Verdad suprema está más allá de las palabras. Las doctrinas son palabras. No son el Camino.