Expresarte tal como eres, sin ninguna forma intencional o sofisticada de ajustarte, es lo más importante.
Un jardín nunca está terminado.
¿Cuánto 'ego' necesitas? Solo lo suficiente como para no ponerte frente a un autobús.
Cuando te sientas, todo se sienta contigo.
Trata cada momento como si fuera el último. No es preparación para algo más.
En la mente del principiante hay muchas posibilidades, en la mente del experto hay pocas.
Darle a tu oveja o vaca un gran campo espacioso es la forma de controlarlo.
La religión no es ninguna enseñanza particular. La religión está en todas partes.
Cuando tenemos nuestro cuerpo y mente en orden, todo lo demás existirá en el lugar adecuado, de la manera adecuada. Pero normalmente, sin darnos cuenta, tratamos de cambiar algo fuera de nosotros; tratamos de ordenar las cosas fuera de nosotros. Pero es imposible organizar las cosas si no estamos en orden. Cuando hacemos las cosas de la manera correcta, en el momento correcto, todo lo demás se organizará.
Las cosas siempre están cambiando, así que nada puede ser tuyo.
Tan pronto como ves algo, ya comienzas a intelectualizarlo. Tan pronto como intelectualizas algo, ya no es lo que viste.
Es la sabiduría la que busca sabiduría.
El verdadero propósito del Zen es ver las cosas como son, observar las cosas como son, y dejar que todo siga su curso. La práctica del Zen es abrir nuestra pequeña mente.
La concentración no proviene de intentar concentrarse en algo, sino de mantener la mente abierta y dirigirla a nada.
En la mente del principiante hay muchas posibilidades; en la mente del experto hay pocas.... En la mente del principiante no hay pensamiento, 'He logrado algo.' Todos los pensamientos centrados en uno mismo limitan nuestra vasta mente. Cuando no tenemos pensamiento de logro, ni pensamiento de uno mismo, somos verdaderos principiantes. Realmente podemos aprender algo.
En el Sutra del Loto, Buda dice que ilumines una esquina, no todo el mundo. Simplemente aclara dónde estás.
Eres perfecto tal como eres y siempre hay espacio para mejorar.
Cuando haces algo, si fijas tu mente en la actividad con algo de confianza, la calidad de tu estado mental es la actividad misma. Cuando estás concentrado en la calidad de tu ser, estás preparado para la actividad.
Cocinar no es solo preparar comida para alguien o cocinar para ti mismo; es expresar tu sinceridad. Así que cuando cocinas, debes expresarte en tu actividad en la cocina. Debes permitirte mucho tiempo.
No puedes hacer una cita con la iluminación.
El Zen está en todas partes... Pero para ti, el Zen está justo aquí.
Cuando vives completamente en cada momento, sin esperar nada, no tienes idea del tiempo.
Un estudiante, lleno de emoción y llorando, imploró: "¿Por qué hay tanto sufrimiento?" Suzuki Roshi respondió: "Ningún motivo."