De la verdadera vacuidad aparece el ser maravilloso.

La verdadera comunicación depende de ser directos unos con otros... Pero la mejor manera de comunicarse puede ser simplemente sentarse sin decir nada.

Deja que tus oídos escuchen sin intentar escuchar. Deja que la mente piense sin intentar pensar y sin intentar detenerla. Eso es práctica.

Preparar comida no es solo acerca de ti y los demás. ¡Es acerca de todo!

Un jardín nunca está terminado.

Es fácil tener calma en la inactividad, es difícil tener calma en la actividad, pero la calma en la actividad es la verdadera calma.

Renunciar a las cosas no es abandonarlas. Es reconocer que todas las cosas se van.

Aunque tengas dolor en las piernas, puedes hacerlo. Aunque tu práctica no sea lo suficientemente buena, puedes hacerlo.

Alguien estaba sentado frente a un girasol, observando el girasol, una taza de sol, y así lo intenté también. Fue maravilloso; sentí todo el universo en el girasol. Esa fue mi experiencia. Meditación del girasol. Apareció una maravillosa confianza. Puedes ver todo el universo en una flor.

Es la sabiduría la que busca sabiduría.

Cuando te engañan por algo más, el daño no será tan grande. Pero cuando te engañas a ti mismo, es fatal. Ya no hay medicina.

Cuando intentas alcanzar algo, tu mente comienza a vagar por otro lado. Cuando no intentas alcanzar nada, tienes tu propio cuerpo y mente aquí. En el budismo es una visión herética esperar algo fuera de este mundo. No buscamos nada fuera de nosotros mismos.

Si piensas que obtendrás algo de la práctica del zazen, ya estás involucrado en una práctica impura.

Dondequiera que vayas, encontrarás a tu maestro, siempre y cuando tengas los ojos para ver y los oídos para oír.

El tiempo va del presente al pasado.

Lo que llamamos "yo" es solo una puerta que se balancea y se mueve cuando inhalamos y exhalamos.

La mente del principiante está vacía, libre de los hábitos de los expertos, lista para aceptar, dudar y abierta a todas las posibilidades.

Morimos, y no morimos.

El punto más importante es aceptarte a ti mismo y estar de pie con tus propios pies.

Todas las descripciones de la realidad son expresiones limitadas del mundo de la vacuidad. Sin embargo, nos aferramos a las descripciones y pensamos que son la realidad. Eso es un error.

Nuestro camino es practicar un paso a la vez, una respiración a la vez, sin la idea de ganar algo.

Encontrar una compostura perfecta en medio del cambio es encontrar el nirvana.

Debes estar más bien agradecido por las malas hierbas que tienes en tu mente, porque eventualmente enriquecerán tu práctica.